Esto no es una pipa

Vaya y lea el "Diario de muerte" de Enrique,
va a entender un poquito más el cuadro, y un poquito menos la vida.
Al fin y al cabo las imágenes de las cosas están aquí y las cosas mismas por allá, nosotros por otro lado y ausencia de puentes, terrible ausencia de puentes.
Nada más eso.

de vuelta

Estoy cansado de irme sin hallarte
como si siempre fuera un tiempo oscuro,
lleno de palabras que han perdido el sentido,
como si nuestras horas
fueran como batallas perdidas en la selva
o como aves que nunca aprendieron el canto de sus padres.

Estoy cansado ya de tantas cosas
como que me he cansado de cansarme de las cosas con un hastío que ni siquiera es propio,
sino que lo he heredado de mis vidas pasadas,
de mis semanas pasadas y poetas pesados
viejos serios y borrachos que eliminaron el verano
del calendario de la poesía.

Ya no estoy cansado.
También esa palabra me la quitaron ellos,
y no me queda sino reinventarlo todo,
reiterar como ellos la misma poesía
con otra luz, quizá con otra letra,
pero siempre la misma.

Canto Negro

Voy a quebrar los cristales del alba cerrada,
voy a morder la distancia.
Voy a partir desnudando las claves del aire
para romper lo que quede de pie.

Voy a cantarle a un sonido
que no existió ni en mi mente,
un grito torpe y esquivo, que no se detiene,
que no se detiene.

Negro fue el día,
abierto de par en par el viento.
Mis colmillos clavándose en la espuma,
en una cosa sagrada y difusa
muy parecida a morderse la lengua,
pero con un dejo callado
de dentelladas dadas contra el aire vacío.

Voy a cantarle a un ruido.

Arte de recordar

Aire

Absolutamente aire es lo que emana de estas primeras líneas pasajeras.

El olor de lo tenue que derramas,
el frío de lo mucho a lo que temes,
la dulzura del labio que te muerdes,
la sombra que te acecha y que te tienta.

Todo, de pronto, se hace una sola gran distancia
que recorrer con tu aire de la mano.
Un solo temor bien camuflado
debajo de las mil seguridades,
que finalmente se hicieron
únicamente NADA.

¿y luego qué?